Conduce seguro con la llegada del buen tiempo
Con la llegada del buen tiempo y de la época estival, los desplazamientos por carretera aumentan. En este sentido, de la misma manera deberían de incrementarse las medidas de seguridad y la precaución a la hora de conducir, ya que con el calor y el buen tiempo también hay que estar alerta, como en el invierno.
Durante los meses de julio y agosto de 2015, la Dirección General de Tráfico (DGT) contó más de 81 millones de desplazamientos de largo recorrido por las carreteras de nuestro país.
Normalmente, la tendencia es ir en aumento y este verano veremos más coches circulando por nuestras carreteras. Según los diferentes estudios, a medida que crecen los desplazamientos, también crece el número de víctimas en la carretera.
Los expertos, en este sentido, saben que son varios los factores que producen un accidente. Sin embargo, hay que señalar que hay errores que pueden resultar fatales. Así, ya sabemos las consecuencias que pueden tener el alcohol o el exceso de velocidad, pero ¿sabías que la falta de hidratación y el calor tienen los mismos efectos que el conducir borracho?
Asimismo, en la época estival tenemos que tener cuidado con la ropa y el calzado que nos ponemos para conducir. Seguro que más de uno ha conducido con chanclas. Hay que tener muy presente que así no se puede conducir un coche, ya que puede provocar muchos accidentes.
A todo ello hay que añadir que debemos tener el automóvil con una temperatura entre 19 y 24 grados y no pasar calor. Para ello, debemos tener aire acondicionado.
Si observamos los diferentes estudios de siniestralidad, vemos que en los trayectos cortos, es donde más accidentes hay. Muchos de ellos son producidos por la mala conservación de las vías. Por ello, debemos estar muy atentos y no distraernos al volante.
Como siempre, pero más ante un viaje, debes revisar tu vehículo. En verano crecen las incidencias. Por ejemplo, se suele llamar mucho por la batería, ya que el uso del aire acondicionado hace que se gaste más rápido.
Además, es fundamental que los neumáticos estén en buen estado. No debemos apurarlos, ya que con las altas temperaturas sufrirán más y se pueden desgastar más fácilmente. Tampoco debes olvidarte de las correas o los frenos, otra parte muy sensible al calor.
Para finalizar, no debes olvidar que tienes que tener cuidado con el sobrepeso del vehículo y con la distribución de las maletas en desplazamientos largos.